OUTSIDERS CUSTOM CLUB


A todos los que nos gustan las motos nos gustaría aprender a arreglarlas y modificarlas. Soñamos con tener todas las herramientas además de un lugar donde reunirnos con los amigos para tomar una cerveza y trabajar en nuestras motos. Fue así cómo Guizar un día lo soñó y decidió hacerlo negocio.


Guizar, cuéntanos un poco sobre ti ¿Cómo nació tu gusto por las motos? ¿Por qué decidiste aprender a arreglarlas y modificarlas?


Mi gusto siempre estuvo presente desde niño, solo qué, como la mayoría de los padres a sus hijos , me inculcaron el miedo hacia ellas, que eran peligrosas y que primero me comprara el ataúd, así reprimí ese gusto mucho tiempo, ya hasta saliendo de la universidad me di cuenta que hay cosas más peligrosas, cómo las mujeres.

El gusto me renació por falta de dinero y oportunidad, salía con una chica que vivía muy lejos de mi casa y siempre tenía que regresar patinando como 1 hora y media y cuando salíamos, ya sabes, camiones y taxis, entonces pensé en comprar un auto, pero no me alcanzaba, al menos no para uno que funcionara y me dejara parado en cualquier lado. Un amigo, Alfonso sabía que estaba buscando un vehículo y me contó sobre un compañero de trabajo que vendía su moto. En ese momento tuve que elegir entre hacerle caso a mi familia o hacerle caso a mi gusto y necesidad. Al final decidí seguir mi instinto y comprarla, una bonita Carabela 150 estilo chopper, estaba fascinado ¡Mi primera moto!

Siempre tuve habilidad para manejar todo tipo de herramientas, me enseñe en el negocio familiar desde pequeño, cortadoras, soldadoras, esmeriles, taladros y demás. Un par de meses después, la chica por la cual había comprado la moto me cortó y caí en depresión , en esos días comencé a ver una serie, SOA, suena estupido pero me motivó, ver las harleys el estilo americano no cargado (vestimenta), las escenas de rodadas en carretera, todo eso era nuevo para mi así que todo lo que estaba viviendo lo transforme en energía y una noche viendo la serie, agarre una segueta y con un poco de miedo, empecé a cortar la moto, pensando en que la voy a cagar pero no hay pedo! Pasé toda la noche cortando y armando. Al final me gustó lo que hice pero quería saber más sobre estilos y accesorios, mi interés creció tanto que empecé a ver tutoriales y programas de modificaciones en discovery.

 Un día un amigo con el que patinaba en el barrio me platicó de una persona que modificaba motos cerca de San Andrés (barrio antiguo de Guadalajara), su nombre es Rigo, le llevé la moto con la intención de hacer amistad y aprender más. La moto quedó como yo quería pero seguí yendo, Él es experto en harleys así que me enseñó muchas cosas y me animo a cambiar la Carabela por una más grande.


Sabemos que te gustan los deportes extremos, platícanos un poco sobre eso...


¡Mucho! desde antes de involucrarme en las motos y hasta la fecha, me gusta la adrenalina. Me juntaba con varios amigos a darle al skate, longboard de downhill, escalar, mountain bike y surf cuando se daba la oportunidad. 

Yo fui el primero con moto en el grupo pero el virus se esparció rápido y poco a poco fueron comprando las suya, a todos nos gustaban estilos diferentes así que entre todos les metíamos mano, a veces no sabíamos que habíamos hecho y teníamos que llevarlas con los expertos. Con el tiempo tomé experiencia y ya era sólo yo el que se las modificaba a mis amigos, fue como el taller de prueba y error. Salíamos a rodar a chapu y así conocí a más gente que también empezaban en el rollo de la custom, como Zain de ZDR y con ellos seguí aprendiendo. Aquí es donde nacen los Outsiders.

Entre las personas que conocí estaba Mike, él le había armado una Kawasaki KZ 750 a su primo. Me invitó a trabajar en el taller donde él trabajaba, modificaban, arreglaban motos y razers. Yo trabajaba en el negocio familiar pero decidí irme a chalanear, quería aprender más. Yo ya tenía una sportster 1200 pero tenía fallas de lubricación, nadie había podido arreglarlo así que me la lleve al taller y ahí Cesar Alvarez, dueño del taller, me ayudó y enseñó, fue como que mi curso intensivo y más completo de mecánica, me ponía a hacer todo y me iba diciendo como, poco a poco de ser chalan pase a ser encargado de ciertas cosas en proyectos importantes... ya estaba adentro.

¿Quiénes son los Outsiders?


Originalmente éramos los amigos que nos juntábamos a meterle mano a las motos, los que salimos a rodar y patinar. Ahora así se llama mi taller y los Outsiders son todos los que llevan sus motos para que las modifiquemos, los que se llevan un diseño original de nosotros pertenecen a la familia.

¿En qué momento decidiste hacerlo negocio? 

El taller decidí ponerlo porque necesitaba un lugar donde poder moverle a mis motos y a la de mis amigos  a cualquier hora del día, donde no tuviera limitaciones por el uso de herramientas o de horario, yo seguía viéndolo como hobbie pues seguía trabajando con César y Mike pero poco a poco empecé a hacerme de herramienta y máquinas que necesitaba para mis proyectos personales y de mis amigos. La voz se empezó a correr, cada vez llegaba más gente nueva queriendo modificar sus motos y empecé a ganar dinero por hacerlo. Tuve que pensar entre dedicarle todo mi tiempo a estos proyectos o solo dejarlos de hobby de fin de semana, claramente me encanta meterles mano así que no tuve que pensarlo demasiado, decidí aventurarme junto con Mike y otros amigos a abrir oficialmente el taller y emprender este proyecto que va creciendo cada día más.  

¿Cuántos años llevas en esto? 

Aproximadamente 6 años desde que compré mi primera moto y la corté.


¿Cuál ha sido el proyecto que más te ha gustado? cuéntanos sobre él.


Todos los proyectos en los que me dan libertad creativa son mis favoritos.

¿Cómo ves el taller Outsiders en unos años? 

El plan a corto y mediano plazo es tener un espacio donde no solo sea negocio, sino también casa club de toda la familia motociclista que hemos hecho a lo largo de estos años, un lugar donde sea un santuario de motos, accesorios originales, exhibición de proyectos y propuestas nuevas.

Hacer de tu hobbie un estilo de vida no es fácil, que le dirías a toda la banda que quiere empezar en el mundo de la modificación? 

No es fácil, se necesita adquirir mucha experiencia, y nunca terminas de aprender, pero no es imposible, yo le digo a la banda que si te apasiona, no temas, obvio habrá dolores de cabeza, bloqueos creativos, muchos problemas, sangre, enojos y hasta ganas de abandonar proyectos complicados, pero si te aferras, el resultado pesa mucho más que los obstáculos y ese resultado es el que vas a amar y hará que quieras enfrentarte a nuevos retos. Haciendo lo que te gusta el dinero llega tarde o temprano, solo hay que confiar en uno mismo y en qué puedes hacer cosas mejores cada vez. 

@Outsiderscustomclub

 Fotografía por

 @robertopuentess

 

Doshaches Co. 2020








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